CHIRIPÁ (variadas y valiosas referencias)

“Vestían los “gauchos sureros” de mi infancia (refiere a la zona de Juárez y allá por 1880/82) amplio “chiripá” o chamal para lo cual se valían de un poncho al que le cosían la boca”. // No vi jamás chiripás de paño ornado con bordados de colores llamativos. Bajo el chiripá algunos hombres ya muy viejos (…) usaban ancho calzón blanco que caía y sobrepasaba la bota de potro; pero fueron los menos”.  (P. 22)

Fuente: El Gaucho Surero, de Nicanor Magnanini - 1943

"El chiripá de bayeta era prenda característica del gauchaje pobre, por ser un tejido de lana de mermada calidad. Los paisanos de más recursos solían utilizar paños ingleses o mantas pampas de fina textura". (P. 146)

Fuente: "La Primitiva Literatura Gauchesca", de Jorge B. Rivera

"Recuerdo haber visto en mis primeros años (hacia 1913) a Melitón Giles y, en ocasiones a otros paisanos, usando chiripá. (...) Usaban botas de potro, (...). Llevaban puesto un saquito corralero y poncho al hombro. Su facón y mate, un pañuelo suelto al cuello y su sombrero de fieltro copudo y de ala baja, que pocas veces se sacaban".

Fuente: "Evocaciones Criollas", de Ricardo Zuberbühler - 1978

"Le tocó el turno a un viejito de bigotes y pera blanca, sombrero gris de ala corta y requintada., con vincha, y chiripá de poncho de vicuña listado. Por detrás del sombrero le caía hasta los hombros una melena plateada formando brillantes rulos. (P. 133) 

El viejito Roldán... usaba melena sujeta con vincha y sombrero con retranca, chiripa negro formando el fundillo a la altura de las rodillas y botas de potro bien sobadas, atadas en la punta con botones de tiento". (P. 140)

Fuente: "El Camino Largo", de Augusto Bialade - 1972

"(...) Tuve que esperar hasta el año 1935 para ver -en La Francia, de Crotto, en el partido de General Alvear- gauchos de chiripá. Habíamos ido con Borges a un remate de haciendas, útiles y enseres, y en un montecito marginal los descubrimos. Por suerte estuvo ahí Borges, porque si no yo podría creer que todo fue un sueño. A simple vista auténticos, eran troperos (la palabra RESERO me llegó con Don Segundo Sombra), viejos y de escasa estatura. Se cubrían con chamberguitos redondos, de ala angosta, levantada adelante; usaban chiripás de color vicuña. Esta circunstancia del color del chiripá me sorprendió, porque yo los presentía negros, preferentemente con calzoncillo cribado, blanco. Después Miguel Casares, al referirse a la ropa de los paisanos de Cañuelas, me aseguró que en tiempos de su infancia todo el mundo llevaba chiripá de color vicuña (algunos a rayas), saquito corralero, rabón, con nido de abeja, chambergo redondo de ala breve, volteada para arriba, al frente. "El único chiripá negro era el Don Ceferino Delgado, que también fue el último". Señalo otro detalle del atuendo de esos gauchos de La Francia: en algunos advertí un jarrito enlozado, celeste, colgado del tirador. Me acuerdo que pensé entonces que si yo hubiera encontrado en una novela gauchos con el mate colgado, habría acusado al autor de confundirlos con boy-scouts.

Después mi erudito amigo John Walter Maguire me explicó que ese mate en el tirador era habitual en los troperos. (...)"

Fuente: "Memoria Sobre la Pampa y los Gauchos", de Adolfo Bioy Casares - 1970